El año 72 el tren la atropelló y le amputaron las dos piernas

Fue muy tremendo lo de Pedro para nosotros porque mi mamá era inválida, no tenía sus piernas. El año 72 el tren la atropelló y le amputaron las dos piernas, entonces Pedro era el dueño de casa, el que trataba por todos los medios de que a mi mamá le consiguieran sus piernas ortopédicas, le conseguía ambulancia, la llevaba al Hospital Maruri. A pesar de que trabajaba, él se daba el tiempo, la tomaba en brazos y partía con ella. Entonces cuando se lo llevaron, mi mamá enloqueció. Yo le escribí a la señora Lucía Pinochet desesperada porque mi mamá trataba de quemar la casa, culpaba a mi papá diciéndole: “A lo mejor tú dijiste algo”. No sabíamos qué pensar. Yo estaba desesperada, vivía en Parcela y ellos en Paine. Yo ya me había casado.

Relatado por Silvia Vargas, hermana de Pedro León Vargas.