Mi padre

Mi papá era súper divertido, un gozador. No era amargado ni fome, le gustaba hacer bromas.
Nació el 24 de junio, por eso mi abuelita Estela, que no era nada de católica, le pone el nombre de Juan Fernando. Mi papá era el mayor, tenía dos hermanas: Marta y Eliana. Marta se quedó a vivir en Puerto Montt, su marido tenía en el lago Chapo una cabaña a la cual íbamos siempre de vacaciones. Eliana, la menor, era asistente social y murió el 2011.

Mi papá era muy bueno para caminar, le gustaba sacar la cuenta de cuánto se demoraba a paso rápido y regular desde Plaza Egaña hasta la calle Lynch, siempre estaba sacando cálculos. Recuerdo cuando iba caminando con uno y se pasaba de largo para que uno le dijera: “Epa, te estás pasando”, en fin, hacía bromas de ese tipo, un poco infantiles pero a nosotros nos daba mucha risa.
Cuando se separan con mi mamá, se va a vivir a casa de la “Hormiguita” en la comuna de la Reina. Nosotros íbamos harto para allá, hay una serie de fotografías de él en ese lugar. Lo que sí, no logro acordarme de cuál era la pieza de mi papá, pero tengo la idea de que era en un lugar como un escritorio, porque recuerdo que había muchos libros. Esa casa ahora es del PC y se llama Miochacán. Ahí se celebran todos los velorios, yo he ido a varios ahí. También hacen unas tocatas o comidas, sé que la estaban restaurando. Esa casa era de Delia del Carril, “La Hormiguita”, una de las mujeres de Neruda. Ella era argentina y fallece en dictadura. Muere después de la detención de mi padre. De hecho, ella escribe una carta cuando se entera de su desaparición.

Relatado por María Luisa Ortiz, hija de Fernando Ortiz.