Paya salió arrancando

Enrique nació el 4 de mayo del 53 en Concepción. Tenía mala suerte, porque aún estaban en el hospital con la Paya, cuando un terremoto lo sacudió todo como por cuatro días. Se cuenta que la Paya salió arrancando y dejó al cabro chico botado.

Mi papá que era ingeniero civil tenía una empresa de construcciones entonces y una parte de la empresa estaba radicada en Concepción, por eso vivíamos allá. Mis primeros recuerdos de nosotros con Enrique comienzan a los cuatro o cinco años. Ya estábamos en Santiago, en la Alianza Francesa, Enrique iba en primero de humanidades como se decía en la época y yo en el kindergarten. A Enrique tuvieron que cambiarlo de colegio porque tenía un problema, era disléxico. Una profesora de la Alianza Francesa, Anne Marie, pionera en el tema, le descubrió la enfermedad. Entonces lo pusieron en el Instituto Nacional y su vida cambió completamente. O sea, mejoró todas sus notas y conoció otra realidad.

Relatado por Max Ropert, hermano de Enrique Ropert.